Si Tomas Jefferson hubiese dicho que la independencia de EU era un problema exclusivo de los americanos
El Conde de Rochambeau dirigió más de 5000 soldados franceses en la decisiva batalla de Yorktown
De vez en cuando escuchamos que el problema cubano lo tenemos que resolver los cubanos. Eso es demagógico y relativo. El problema cubano lo habríamos resuelto los cubanos si la URSS con sus recursos no hubiera mantenido a la dictadura castrista por más de 30 años.
El problema cubano se habría resuelto hace mucho tiempo si la autocracia chavista no hubiera sostenido a flote a la dictadura castrista por casi dos décadas. Estaría resuelto si los países democráticos hubieran sido solidarios con los que fuera y dentro de Cuba luchan por la democracia.
La guerra de independencia que dio la libertad a los Estados Unidos y que inició el experimento democrático ejemplar de esta nación fue posible por la ayuda de otros pueblos y gobiernos a los estadounidenses que luchaban contra Inglaterra.
En este artículo, que el CID tiene el gusto de publicar, Marta Menor expone la importancia de esa ayuda.
¿Si Tomas Jefferson hubiese dicho ....
Marta Menor
1 de abril 2013
¿ Si Tomas Jefferson hubiese dicho que , el problema de los Estados Unidos contra la monarquía de Jorge III debe ser resuelto únicamente por los estadounidenses, y Washington, Franklin, Adams y el resto de los próceres de la patria hubiesen estado de acuerdo, ¿podrían los Estados Unidos haber obtenido su independencia? Probablemente no.
Las colonias americanas comenzaron el reclutamiento de soldados a principios de 1776. Muchos de ellos eran agricultores, cazadores, matones que tenían poco o ningún entrenamiento en combate. El 2 de julio de 1776 el Congreso finalmente decidió que "estas Colonias Unidas son, y por derecho deben ser, estados libres y soberanos." Dos días después, el 4 de julio de 1776 cincuenta y seis congresistas se reunieron para aprobar la Declaración de Independencia de los Estados Unidos, redactada por Jefferson.
Las relaciones diplomáticas se iniciaron. Ni Jefferson ni los padres fundadores estimaron que el problema de los Estados Unidos con el gobierno británico podía ser resuelto únicamente por los estadounidenses y no rechazaron el apoyo de las potencias extranjeras. Por el contrario, lo buscaron.
Francia
Benjamin Franklin fue nombrado embajador en Francia en septiembre de 1776 y poco después zarpó hacia ese país. Los Estados Unidos carecían de armas, así como de aliados, y Franklin buscó el apoyo de Francia. Los ministros franceses no estaban interesados en el conflicto, pero bajo la influencia de Franklin, prestaron dinero a las colonias que habían decidido financiar la guerra con préstamos en lugar de impuestos. Más tarde, Francia envió miles de soldados y marineros para apoyar el esfuerzo de guerra norteamericano, el más famoso de los cuales fue el marqués de Lafayette.
Aunque era un gran analista, autor, teórico político, científico, inventor, estadista y diplomático, Franklin logró poner su orgullo a un lado y se acercó al Gobierno francés una y otra vez en busca de ayuda financiera. Sin protagonismo ni ruedas de prensa.
España
Aunque la ayuda financiera de España fue menor en comparación con la de Francia, España junto con Francia proporcionó el capital inicial para la contienda en una proporción de 50/50 por ciento para establecer la empresa ficticia Roderigue Hortalez and Company. Una empresa con el propósito encubierto de proporcionar armas y suministros militares indispensables. El acuerdo secreto con los colonos para apoyarlos les dió confianza a estos para firmar la Declaración de Independencia.
Al final del conflicto, los estadounidenses estuvieron de acuerdo con que Gran Bretaña cediera de nuevo a España el "Occidente y el Este de la Florida", incluyendo Luisiana . En lugar de gritar "Que se Vayan los Franceses y los Españoles", los Estados Unidos compraron Luisiana a Francia años más tarde por 15 millones de dólares durante la presidencia de Jefferson. El Oeste de la Florida fue declarado territorio de EE.UU. en 1810 y el Tratado Adams Onis de 1819 dio lugar a la cesión de España de la Florida Oriental y Occidental definiendo la frontera entre los Estados Unidos y México. Ninguna tierra fue confiscada en nombre del bienestar de la patria.
Cuba
Washington necesitaba fondos para pagar a las tropas estadounidenses y pidió a Rochambeau ayuda para cubrir el déficit financiero. Este a su vez buscó el apoyo de De Grasse para recaudar el dinero. De Grasse zarpó de Haití y se detuvo en Matanzas por un día. Tuvo éxito en la obtención de fondos a través de las autoridades españolas de La Habana. Una parte importante del dinero fue recaudado por las mujeres de La Habana que ofrecieron poner sus joyas y diamantes como garantía. El dinero fue recaudado en aproximadamente 6 horas. Cinco horas después de la llegada de la fragata Aigrette, enviado por De Grasse, la suma de 1.200.000 livres - la moneda francesa de la época - fue entregada a bordo.
Cañoneros y buques de guerra de EE.UU. fueron reparados y equipados en La Habana y de allí partieron expediciones para apoyar la guerra. Flotas de gran alcance fueron enviadas a las costas Americanas, incluyendo además de cubanos, reclutas enviados desde México, Guatemala y Venezuela. Los estadounidenses no llamaron estas expediciones "invasiones extranjeras", sino que ¡les dio la bienvenida!
Alemania
Federico II de Prusia permitió a un agente estadounidense comprar armas en Prusia sin pasar por los puertos ingleses.
Friedrich Wilhelm von Steuben de Prusia llegó a los Estados Unidos para servir a las órdenes de George Washington, entrenó al Ejército Continental en Valley Forge y más tarde escribió el primer manual de ejercicios militares para el ejército de Estados Unidos. Los estadounidenses no rechazaron la pericia militar extranjera. Por el contrario, aprendieron de ella adoptándola como suya.
Holanda
Después de 1778 la lucha se trasladó al sur y el conflicto adquirió una dimensión internacional. Con el avance contra Inglaterra, Holanda también decidió tomar parte en el conflicto, con la esperanza de sacar provecho de sus posiciones marítimas en el extranjero. Ellos intercambiaron y obtuvieron recompensa por prisioneros y rehenes sin esperar el regreso de buques de guerra y mercantes capturados. No se escucharon gritos de “opresión capitalista”.
Haití
En octubre de 1779 más de 500 haitianos negros libres se unieron a las tropas norteamericanas y francesas en un ataque sin éxito contra los británicos de Savannah. Nadie llamó “mercenarios” a estos hombres.
Victoria
En 1781, las tropas estadounidenses dirigidos por George Washington dieron la bienvenida a los soldados franceses que desembarcaron en Rhode Island para unirse a los estadounidenses contra el ejército británico que controlaba Nueva York. Las tropas estadounidenses liderados por Washington y las tropas francesas dirigidas por el conde de Rochambeau ganaron contra el ejército británico al mando de Lord Cornwallis en lo que se conoce como la batalla de Yorktown. Una victoria decisiva que llevó a Gran Bretaña a negociar el fin del conflicto. No hubo negociaciones de paz porque los rebeldes victoriosos se negaron a hacerlo hasta que la independencia de las colonias fuera reconocida. Un año mas tarde, el rey Jorge III reconoció la independencia de las colonias en un discurso y finalmente el 3 de Septiembre de 1783 se firmó el Tratado de Paris.
Thomas Jefferson y los próceres de la patria estaban conscientes incluso antes de declarar su independencia de Gran Bretaña en 1776, que la guerra por la independencia se perdería sin el apoyo de otras naciones y buscaron el apoyo externo para su causa.
Con la ayuda de Francia, España, Cuba, Haití, Holanda, Prusia, la Liga Armada de la Neutralidad - una coalición de Estados europeos creada por Catalina la Grande de Rusia, que siguió una política pasiva de hostilidad hacia Gran Bretaña - matones, cazadores, comerciantes, generales, marqueses, condes y agricultores, hombres negros y blancos, nació una nueva nación: los Estados Unidos de América.
Durante décadas hemos estado oyendo voces que afirman que el problema cubano contra el régimen que los oprime debe ser resuelto únicamente por los cubanos.
¡¿En serio?!
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El problema cubano se habría resuelto hace mucho tiempo si la autocracia chavista no hubiera sostenido a flote a la dictadura castrista por casi dos décadas. Estaría resuelto si los países democráticos hubieran sido solidarios con los que fuera y dentro de Cuba luchan por la democracia.
La guerra de independencia que dio la libertad a los Estados Unidos y que inició el experimento democrático ejemplar de esta nación fue posible por la ayuda de otros pueblos y gobiernos a los estadounidenses que luchaban contra Inglaterra.
En este artículo, que el CID tiene el gusto de publicar, Marta Menor expone la importancia de esa ayuda.
¿Si Tomas Jefferson hubiese dicho ....
Marta Menor
1 de abril 2013
¿ Si Tomas Jefferson hubiese dicho que , el problema de los Estados Unidos contra la monarquía de Jorge III debe ser resuelto únicamente por los estadounidenses, y Washington, Franklin, Adams y el resto de los próceres de la patria hubiesen estado de acuerdo, ¿podrían los Estados Unidos haber obtenido su independencia? Probablemente no.
Las colonias americanas comenzaron el reclutamiento de soldados a principios de 1776. Muchos de ellos eran agricultores, cazadores, matones que tenían poco o ningún entrenamiento en combate. El 2 de julio de 1776 el Congreso finalmente decidió que "estas Colonias Unidas son, y por derecho deben ser, estados libres y soberanos." Dos días después, el 4 de julio de 1776 cincuenta y seis congresistas se reunieron para aprobar la Declaración de Independencia de los Estados Unidos, redactada por Jefferson.
Las relaciones diplomáticas se iniciaron. Ni Jefferson ni los padres fundadores estimaron que el problema de los Estados Unidos con el gobierno británico podía ser resuelto únicamente por los estadounidenses y no rechazaron el apoyo de las potencias extranjeras. Por el contrario, lo buscaron.
Francia
Benjamin Franklin fue nombrado embajador en Francia en septiembre de 1776 y poco después zarpó hacia ese país. Los Estados Unidos carecían de armas, así como de aliados, y Franklin buscó el apoyo de Francia. Los ministros franceses no estaban interesados en el conflicto, pero bajo la influencia de Franklin, prestaron dinero a las colonias que habían decidido financiar la guerra con préstamos en lugar de impuestos. Más tarde, Francia envió miles de soldados y marineros para apoyar el esfuerzo de guerra norteamericano, el más famoso de los cuales fue el marqués de Lafayette.
Aunque era un gran analista, autor, teórico político, científico, inventor, estadista y diplomático, Franklin logró poner su orgullo a un lado y se acercó al Gobierno francés una y otra vez en busca de ayuda financiera. Sin protagonismo ni ruedas de prensa.
España
Aunque la ayuda financiera de España fue menor en comparación con la de Francia, España junto con Francia proporcionó el capital inicial para la contienda en una proporción de 50/50 por ciento para establecer la empresa ficticia Roderigue Hortalez and Company. Una empresa con el propósito encubierto de proporcionar armas y suministros militares indispensables. El acuerdo secreto con los colonos para apoyarlos les dió confianza a estos para firmar la Declaración de Independencia.
Al final del conflicto, los estadounidenses estuvieron de acuerdo con que Gran Bretaña cediera de nuevo a España el "Occidente y el Este de la Florida", incluyendo Luisiana . En lugar de gritar "Que se Vayan los Franceses y los Españoles", los Estados Unidos compraron Luisiana a Francia años más tarde por 15 millones de dólares durante la presidencia de Jefferson. El Oeste de la Florida fue declarado territorio de EE.UU. en 1810 y el Tratado Adams Onis de 1819 dio lugar a la cesión de España de la Florida Oriental y Occidental definiendo la frontera entre los Estados Unidos y México. Ninguna tierra fue confiscada en nombre del bienestar de la patria.
Cuba
Washington necesitaba fondos para pagar a las tropas estadounidenses y pidió a Rochambeau ayuda para cubrir el déficit financiero. Este a su vez buscó el apoyo de De Grasse para recaudar el dinero. De Grasse zarpó de Haití y se detuvo en Matanzas por un día. Tuvo éxito en la obtención de fondos a través de las autoridades españolas de La Habana. Una parte importante del dinero fue recaudado por las mujeres de La Habana que ofrecieron poner sus joyas y diamantes como garantía. El dinero fue recaudado en aproximadamente 6 horas. Cinco horas después de la llegada de la fragata Aigrette, enviado por De Grasse, la suma de 1.200.000 livres - la moneda francesa de la época - fue entregada a bordo.
Cañoneros y buques de guerra de EE.UU. fueron reparados y equipados en La Habana y de allí partieron expediciones para apoyar la guerra. Flotas de gran alcance fueron enviadas a las costas Americanas, incluyendo además de cubanos, reclutas enviados desde México, Guatemala y Venezuela. Los estadounidenses no llamaron estas expediciones "invasiones extranjeras", sino que ¡les dio la bienvenida!
Alemania
Federico II de Prusia permitió a un agente estadounidense comprar armas en Prusia sin pasar por los puertos ingleses.
Friedrich Wilhelm von Steuben de Prusia llegó a los Estados Unidos para servir a las órdenes de George Washington, entrenó al Ejército Continental en Valley Forge y más tarde escribió el primer manual de ejercicios militares para el ejército de Estados Unidos. Los estadounidenses no rechazaron la pericia militar extranjera. Por el contrario, aprendieron de ella adoptándola como suya.
Holanda
Después de 1778 la lucha se trasladó al sur y el conflicto adquirió una dimensión internacional. Con el avance contra Inglaterra, Holanda también decidió tomar parte en el conflicto, con la esperanza de sacar provecho de sus posiciones marítimas en el extranjero. Ellos intercambiaron y obtuvieron recompensa por prisioneros y rehenes sin esperar el regreso de buques de guerra y mercantes capturados. No se escucharon gritos de “opresión capitalista”.
Haití
En octubre de 1779 más de 500 haitianos negros libres se unieron a las tropas norteamericanas y francesas en un ataque sin éxito contra los británicos de Savannah. Nadie llamó “mercenarios” a estos hombres.
Victoria
En 1781, las tropas estadounidenses dirigidos por George Washington dieron la bienvenida a los soldados franceses que desembarcaron en Rhode Island para unirse a los estadounidenses contra el ejército británico que controlaba Nueva York. Las tropas estadounidenses liderados por Washington y las tropas francesas dirigidas por el conde de Rochambeau ganaron contra el ejército británico al mando de Lord Cornwallis en lo que se conoce como la batalla de Yorktown. Una victoria decisiva que llevó a Gran Bretaña a negociar el fin del conflicto. No hubo negociaciones de paz porque los rebeldes victoriosos se negaron a hacerlo hasta que la independencia de las colonias fuera reconocida. Un año mas tarde, el rey Jorge III reconoció la independencia de las colonias en un discurso y finalmente el 3 de Septiembre de 1783 se firmó el Tratado de Paris.
Thomas Jefferson y los próceres de la patria estaban conscientes incluso antes de declarar su independencia de Gran Bretaña en 1776, que la guerra por la independencia se perdería sin el apoyo de otras naciones y buscaron el apoyo externo para su causa.
Con la ayuda de Francia, España, Cuba, Haití, Holanda, Prusia, la Liga Armada de la Neutralidad - una coalición de Estados europeos creada por Catalina la Grande de Rusia, que siguió una política pasiva de hostilidad hacia Gran Bretaña - matones, cazadores, comerciantes, generales, marqueses, condes y agricultores, hombres negros y blancos, nació una nueva nación: los Estados Unidos de América.
Durante décadas hemos estado oyendo voces que afirman que el problema cubano contra el régimen que los oprime debe ser resuelto únicamente por los cubanos.
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1 comments:
Excelente apreciación !
12 de abril de 2013, 11:00Publicar un comentario